¿Quién Puede Solicitar Asilo en los Estados Unidos?
El derecho al asilo es una protección legal que ofrece el gobierno de los EE. UU. a personas que no pueden o no quieren regresar a su país de origen debido a un miedo fundado de persecución. A continuación, te explicamos de manera práctica quién puede aplicar, cómo funciona el proceso, y por qué es importante contar con el apoyo de un abogado de inmigración.
¿Qué es el asilo?
El asilo es una forma de protección que permite a una persona permanecer en los Estados Unidos en lugar de ser deportada a un país donde teme sufrir daño grave. Es un derecho reconocido tanto en la legislación nacional como en tratados internacionales.
De acuerdo con el Servicio de Ciudadanía e Inmigración de Estados Unidos (USCIS), puedes solicitar asilo si estás físicamente presente en los EE. UU., independientemente de tu estatus migratorio, y cumples con ciertos requisitos legales.
¿Tienes que ser de un país específico?
No. El asilo no se basa en tu país de origen, sino en tus experiencias personales. Lo importante es demostrar que enfrentas una amenaza real de persecución si regresas a tu país.
¿Cuáles son las razones válidas para pedir asilo?
Según la ley de inmigración de EE. UU., debes demostrar que has sido perseguido o que tienes un temor fundado de persecución en tu país de origen por motivos de:
Raza
Religión
Nacionalidad
Opinión política
Pertenencia a un grupo social determinado
Estas categorías están definidas legalmente, y su interpretación puede variar dependiendo del caso. Por ejemplo, un “grupo social determinado” podría incluir a personas LGBTQ+, sobrevivientes de violencia doméstica o personas perseguidas por pandillas en ciertas circunstancias.
¿Qué no califica como motivo para asilo?
Aunque situaciones como la pobreza, la delincuencia generalizada o los desastres naturales pueden representar grandes dificultades, no son suficientes por sí solas para obtener asilo. Debes demostrar que tú, específicamente, eres un objetivo de persecución y que esa persecución está relacionada con una de las cinco categorías mencionadas.
¿Qué evidencia necesito?
Cada solicitud de asilo es diferente, pero USCIS y los jueces de inmigración evalúan lo siguiente:
Tu testimonio personal (debe ser coherente y creíble)
Pruebas documentales: reportes médicos, fotos, cartas, registros policiales o judiciales, informes de derechos humanos, etc.
Condiciones del país: se revisan informes oficiales y fuentes confiables sobre la situación política, social o cultural de tu país de origen.
Recuerda: aunque no tengas todos los documentos, tu testimonio puede ser suficiente si es creíble y detallado.
¿Cuándo debo presentar mi solicitud?
Debes presentar tu solicitud de asilo dentro de un año desde la fecha en que llegaste a EE. UU. Hay algunas excepciones si puedes demostrar “circunstancias extraordinarias” que justifiquen el retraso, como cambios en tu situación personal o problemas médicos o legales.
¿Cómo se solicita el asilo?
Hay dos formas principales de solicitar asilo:
Proceso afirmativo: Presentas el Formulario I-589 ante USCIS mientras no estás en proceso de deportación. Tendrás una entrevista con un oficial de asilo.
Proceso defensivo: Solicitas asilo como defensa contra la deportación en una corte de inmigración después de haber sido detenido o si tu solicitud afirmativa fue denegada.
¿Qué pasa si me aprueban el asilo?
Si te otorgan el asilo:
Podrás permanecer legalmente en EE. UU.
Podrás trabajar legalmente.
Podrás solicitar asilo para tu cónyuge e hijos (si estaban en EE. UU. contigo o los incluiste en tu solicitud).
Al cabo de un año, puedes solicitar la residencia permanente (Green Card).
¿Y si me lo niegan?
Si presentaste una solicitud afirmativa y fue negada, generalmente tu caso será referido a un juez de inmigración para un proceso defensivo. Todavía tendrás la oportunidad de presentar tu caso ante la corte y apelar si es necesario.
¿Por qué es importante tener un abogado?
La ley de asilo es compleja y cambia con frecuencia. Un abogado de inmigración te puede ayudar a:
Evaluar si calificas.
Reunir y presentar pruebas de manera adecuada.
Prepararte para entrevistas o audiencias.
Navegar el proceso legal sin errores que puedan costarte el caso.
Solicitar asilo por cuenta propia es posible, pero hacerlo con el acompañamiento de un profesional aumenta significativamente tus posibilidades de éxito.
Tu seguridad importa
Solicitar asilo es un derecho, no un privilegio. Si tú o alguien que conoces está viviendo con miedo o inseguridad, no estás solo. Existen recursos legales, organizaciones sin fines de lucro y abogados que pueden ayudarte. Agenda una cita con nosotros y explora tus opciones hoy mismo!